La comitiva convivió con las protagonistas de la muestra, la cual es organizada por la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), con la colaboración de la Embajada de Canadá y el Fondo Canadá para Iniciativas Locales en México.
La secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, expuso que, conjuntamente, en México y Canadá se hablan 121 lenguas indígenas, sin contar las variantes; esto, aseguró, se vuelve una riqueza de la región.
“Las culturas de nuestro país no desaparecieron hace 500 años, sino que han resistido, siguen vivas, y hoy estas mujeres son testimonio de ello”, subrayó.
En su intervención, la presidenta honoraria de la Coordinación de Memoria Histórica y Cultural de México, Beatriz Gutiérrez Müller, expresó que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha destinado una parte importante del presupuesto para atender a los pueblos indígenas y acortar la brecha de desigualdad y racismo, así como fomentar la participación femenina e inclusión; “sin embargo, aún con estos esfuerzos se está en deuda con ellos”.
A su vez, la esposa del primer ministro de Canadá, Sophie Grégoire, reiteró el compromiso del gobierno canadiense para la reconciliación con sus pueblos indígenas y reconoció el trabajo de las mujeres homenajeadas en la exposición, por ser fuente de inspiración para la futura generación de líderes indígenas en América del Norte.
La exposición “Miradas originarias” surge de la necesidad de visibilizar la lucha contra la marginación que padecen mujeres y niñas de los pueblos indígenas y afrodescendientes en ambas naciones. Fue curada por la promotora cultural Nadia Islas y presenta el trabajo de la artista visual mexicana Citlali Haro, quien trabajó ocho meses en estas obras y tomó como base ilustrativa las referencias documentales y personales proporcionadas por las homenajeadas, con el fin de plasmar identidades, sueños, convicciones y territorios de cada una.
Las mujeres retratadas son Amaranta Gómez, antropóloga y activista zapoteca por la diversidad de género y educación sexual; Angela Lavallee, activista canadiense ocupada en el desarrollo comunitario y la erradicación de la violencia de género de las Primeras Naciones; Elda Fernández, impulsora de la lengua y escritura tének (huasteca); Fátima Gamboa, activista y abogada maya involucrada en la justicia con perspectiva de género e interculturalidad.
Además de Gaby Citlahua, gestora nahua defensora de la identidad indígena desde la mirada femenina; Irma Pineda, poetisa y promotora cultural zapoteca, representante de los pueblos indígenas ante la Organización de las Naciones Unidas; Leena Evic, educadora y empresaria inuit dedicada a la preservación y educación de los saberes tradicionales; Martha Sánchez, lideresa amuzga impulsora de la autonomía y derechos de las mujeres indígenas.
Micaela Hernández, defensora a nivel comunitario y estatal de los derechos de las mujeres tzeltal; Rubí Huerta, poeta purépecha dedicada al reconocimiento, promoción y preservación de su lengua; Tanya Sirois, directora ejecutiva innu, enfocada en la creación de políticas públicas pertinentes con las realidades indígenas; y Zara Monroy, artista y pescadora seri, vocera por los derechos de los pueblos originarios y la diversidad de género.
“Miradas originarias” permanecerá hasta el 26 de marzo de 2023, en la Sala del Primer Nivel del Museo Nacional de las Culturas del Mundo, ubicado en la calle Moneda No. 13, a una cuadra del Metro Zócalo/Tenochtitlan, en el Centro Histórico de la Ciudad de México. Horario: martes a domingo, de 10:00 a 18:00 horas. Entrada libre.