El acto de entrega-recepción, realizado en las instalaciones de la Representación, fue encabezado por el embajador de México en Alemania, Francisco Quiroga Fernández, así como por el vicedirector general de Cultura y Sociedad del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores de Alemania, Stefan Rössel. En la ceremonia, se reconoció la sensibilidad de la sociedad alemana para sumar esfuerzos e impedir el tráfico, la exhibición y el comercio ilegal de bienes culturales.
“Tener estas piezas arqueológicas como suvenires o artículos de decoración constituye un agravio a los pueblos originarios. De allí que su restitución no solo garantiza su preservación y estudio, sino que devuelve a nuestras comunidades indígenas una parte fundamental de su memoria histórica”, declaró el embajador Quiroga Fernández.
En este sentido, a través de un enlace virtual, la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, señaló que esta devolución, por medio de la cual se llega a las 13,422 piezas arqueológicas restituidas a nuestro país, en la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, “es fruto de esfuerzos extraordinarios por parte de curadores, arqueólogos, diplomáticos, personal de aduanas y, en general, de gente que cree en las relaciones bilaterales basadas en el entendimiento, el respeto y la justicia”.
Recordó que en el marco de la Conferencia Mundial sobre Políticas Culturales y Desarrollo Sostenible (Mondiacult 2022), celebrada en nuestro país, los Estados presentes, entre ellos México y Alemania, asumieron el compromiso de impulsar una nueva conciencia en torno al respeto de los lugares de origen del patrimonio cultural.
Acompañada del director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, y de la subsecretaria de Relaciones Exteriores de nuestro país, Carmen Moreno Toscano, Frausto Guerrero explicó que de las 75 piezas devueltas a México, 74 provienen del Museo Schloss Salder, de la ciudad de Salzgitter, ubicada en el estado de Baja Sajonia.
Al respecto, el antropólogo Diego Prieto indicó que 74 objetos fueron encontrados hace 120 años, por un maestro alemán que trabajaba en la perforación de un pozo en la ciudad de Tampico, Tamaulipas, en 1900, y que se incorporaron a dicho museo hacia 1963.
Aunque no está totalmente documentado el modo en que estos bienes –de entre 500 y 2,000 años de antigüedad– llegaron a Alemania, la ciudad de Salzgitter y el Museo Schloss Salder tomaron la iniciativa de devolverlos de manera voluntaria a México.
La pieza restante es un mortero trípode de piedra, de aproximadamente 4,000 años de antigüedad, confiscada en la aduana de la ciudad de Leipzig, luego que el destinatario de su envío postal no pudo presentar a las autoridades el certificado de exportación vigente necesario para acreditar su posesión lícita.
La subsecretaria de Relaciones Exteriores, Carmen Moreno Toscano, señaló: “México y Alemania somos socios estratégicos que compartimos intereses y que, en nuestra calidad de actores globales responsables, mantenemos amplias coincidencias en la agenda multilateral y en los principales foros y organizaciones internacionales”.