Escrita, dirigida, producida y protagonizada por Iñigo Abaroa en su debut cinematográfico, la pelicula se sumergirá en una fusión de géneros que van desde la comedia y el drama, hasta la ciencia ficción pasando por la animación, todo contado a través de impresionantes visuales.
Ambientada en un México futurista, AZTECAMURAI se centra en UNO (Abaroa), quien a través de un juego que fusiona el profesionalismo del fútbol con la mitología enmascarada de la lucha libre, compite por la redención de su familia y para lograrlo, deberá clasificarse como uno de los pocos jugadores del mundo en ULTRAXIS, un deporte virtual -absolutamente creado por el guionista- donde se utilizan plataformas de realidad virtual, pero que mantiene las reglas de los deportes de pelota: aquí el atleta en la plataforma es el atleta en el campo.
Sin avatares; la velocidad, la resistencia y la habilidad distinguen a la élite. Para reclasificar, UNO necesita reconciliarse con su antiguo entrenador, PROFEI, (Rafa Simón). Viéndose envuelto en un desafío de brutales ejercicios y simulaciones surrealistas que lo obligan a enfrentarse no sólo a la muerte de su padre, RAÚL (Aarón Díaz), sino que también enfrentarse con sus propios demonios internos.
“Aztecamurai me pareció una historia diferente desde el momento en que leí el guión” declara Aarón Díaz, “al principio, es un mundo de ciencia ficción audaz con un deporte completamente nuevo y algo de comeida absurda, pero lo que me sorprendió es la humanidad que late en su interior. Es una historia de redención, paternidad y expiación emocional; orgullosamente mexicana y audazmente futurista a la vez”
La pelicula se filmó en la ciudad de México y en Mexcaltitlán, Nayarit, una isla de manglares cuya tradición reivindica el “antiguo Aztlán” la mítica patria mexica, y según algunas tradiciones, la cuna de Huitzilopochtli. Con el apoyo de Sectur Nayarit, la producción incorporó a más de 100 mexcaltecos al rodaje, aprovechando una comunidad arraigada en la pesca.